El Camino de Santiago, más seguro y barato

Cada año centenares de miles de personas se animan a hacer alguna de las rutas que conducen a Santiago a través de itinerarios milenarios. Las motivaciones pueden ser muchas -religiosas, turísticas, deportivas- pero hay un cuestión que atañe a todos los peregrinos, su seguridad. Por ello se han puesto en marcha iniciativas como la tarjeta Camino Card, una herramienta diseñada por Mutua Madrileña que aúna prestaciones importantes y descuentos del 10 % en diferentes negocios. Esta tarjeta, que fue presentada ayer en Madrid, tiene diferentes opciones y tarifas en función de la duración de cada itineario. Así, existen tres opciones, para siete, quince y 30 días.


Esta tarjeta permite beneficiarse de prestaciones de asistencia sanitaria con gastos médicos, farmaceúticos o de hospitalización de hasta 6.000 euros. También puede se útil ante problemas odontológicos de urgencia, para la repatriación de heridos, la localización de equipaje u objetos personales perdidos.


Catedral de Santiago. Foto: Concello de Santiago.


Catedral de Santiago. Foto: Concello de Santiago. 



Pero hay mucho más, puesto que con esta credencial  los peregrinos de Camino a Santiago tienen opción a descuentos del más del 10 % en hasta 600 establecimientos y servicios muy útiles durante el recorrido. Así hay campings, albergues, pensiones, hoteles, hostales y casas rurales que harán descuentos a los peregrinos que tengan esta tarjeta, así como establecimientos de restauración -restaurantes, supermercados o panaderías- empresas de transportes, lavanderías, de reparación de bicicletas, podólogos, masajistas y hasta alquiler de burros y caballos.


Según los datos facilitados por la Camino Card, el Camino de Santiago es la mayor ruta de peregrinación religiosa y cultural del mundo y cuenta con 22 itinerarios que cruzan España en diferentes líneas. Las cifras de 2013 reflejan que un total de 215.880 personas llegaron a la Catedral de Santiago, un número un 12 % mayor a la del año anterior. De ellos, el 51 % eran españoles y el 49 % extranjeros.